Hotel Hasseroeder Hof Wernigerode

Reseña de un crítico de hotel

Mi reciente estancia en el Hasseröder Hof, situado en la pintoresca Wernigerode, fue una experiencia agradable y reconfortante, perfecta para una escapada en la tranquilidad de las montañas de Harz. A pesar de mis primeras impresiones un poco desfavorables, pronto encontramos nuestro ritmo y logramos disfrutar de las comodidades que el hotel ofrece, como sus habitaciones limpias y recientemente renovadas, dotadas con un área de estar acogedora y un baño privado. El desayuno, que comienza a las 8 am, me pareció un buen comienzo para el día, aunque un poco limitado en opciones. La hospitalidad del personal fue el verdadero punto fuerte de nuestra estancia: siempre dispuestos a ayudar, hicieron que nos sintiéramos como en casa. Para explorar Wernigerode, la ubicación del hotel es excelente, con una parada de autobús justo al lado que conecta con el centro en apenas cinco minutos, lo que facilita mucho los paseos por la zona, aunque es aconsejable planificar las cenas en el centro de la ciudad, ya que el servicio de autobuses es más limitado por la noche. Lo que realmente me sorprendió fue el restaurante del hotel, donde degustamos algunas especialidades rústicas bien elaboradas, aunque, como amante de la cocina vegetariana, esperaría una mayor variedad en el menú. A pesar de esto, el sabor y la calidad de los platos fueron satisfactorios. En conjunto, el Hasseröder Hof es un lugar recomendable, especialmente por su precio razonable y el ambiente acogedor que respira hospitalidad. ¡No olviden llevar un paraguas por si acaso!